Fecha de publicación: Oct 12, 2011 8:10:4 PM
EXPOSICIÓN DE ANTONIO LÓPEZ
La sala de exposiciones temporales del museo Thyssen Bornemisza de Madrid ha expuesto, del 28 de junio al 25 de septiembre de 2011, una completa representación de la obra del pintor y escultor realista español Antonio López, nacido en Tomelloso (Ciudad Real), el 6 de enero de 1936, meses antes del inicio de la Guerra Civil española. Decidió dedicarse a la pintura por su temprana vocación por el dibujo y por la influencia de su tío, el pintor Antonio López Torres. Estudió en la Academia de Bellas Artes de San Fernando (1950-1955). Realizó sus primeras exposiciones individuales en Madrid (1957-1961). En 1961 se casó con la pintora María Moreno, con la que tuvo dos hijas. De 1965 a 1969 fue profesor de la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. En 1985 se le concedió el premio Príncipe de Asturias de las Artes. En 1993 fue nombrado miembro de número de la Real Academia de San Fernando. Ese mismo año el Museo Reina Sofía le dedicó una exposición antológica. En 2006, recibió el premio Velázquez de las Artes Plásticas.
Su obra está influída por Salvador Dalí, de quien tomó el gusto por la realidad y el predomino del dibujo sobre la pintura. Sus cuadros se desarrollan a lo largo de varios años incluso décadas, con una plasmación lenta y meditada, hasta que consigue plasmar la esencia del objeto o paisaje en el lienzo. Realiza sus obras con tanto detalle que roza lo fotográfico. Sus preferencias van desde las vistas de Madrid, hasta los retratos de sus familiares, pasando por los objetos más cotidianos y cercanos.
La exposición, que contenía obras de todas sus etapas, pero mayoritariamente de su última producción, estaba dividida en dos partes en las que había pintura, escultura y dibujo. La primera parte mostraba la obra más reciente del artista. Para acceder a la segunda parte de la exposición, había que salir de la primera sala y bajar a otra sala en un sótano, donde estaban expuestas obras desde sus orígenes hasta su primera madurez.
Este es uno de los cuadros más famosos de Antonio López, su título es Gran Vía, tardó siete años en pintarlo, (1974-1981). Acudía a las 6:30 de la mañana a pintar, y lo hacía durante 30 o 40 minutos porque era el tiempo que duraba la luz que le interesaba y es el único cuadro que pintó desde el suelo porque el resto de sus obras de la ciudad las realizó desde las azoteas, terrazas o balcones de los edificios, ya que es un pintor que realiza su obras de la ciudad de Madrid al aire libre. A mí es uno de los que más me han gustado de la primera parte de la exposición.
El título de esta obra es Madrid visto desde Vallecas, (1990-2006) está realizado desde la azotea de la torre de bomberos de Vallecas, es un cuadro de unas dimensiones bastante grandes. Éste como otros cuadros parecen fotografías, pero son pintura.
Madrid desde Torres Blancas, (1976-1982). Este es otro de los cuadros de la muestra donde se plasma la minuciosidad del artista a la hora de trabajar, son obras muy laboriosas que se han conseguido a lo largo de varios años y tiene un aspecto aéreo. Me han gustado mucho las tonalidades del cielo.
Me llama la atención de todos los cuadros que expone de la ciudad de Madrid que nunca pinta gente por la calle parece una ciudad desierta.
En la primera parte había unos cuadros de interiores como La nevera (1991-1994), Lavabo y espejo (1967), Taza de wáter y ventana (1968-1971). Son pinturas casi fotográficas de escenas cotidianas que están realizadas con una gran minuciosidad.
En la segunda parte de la exposición hubo un cuadro que me llamó la atención que fue el de Mujer en la bañera (1968), porque parecía que tenías el agua ahí delante de ti.
Dentro de las esculturas la que más me llamó la atención fue la de María dormida (1964), parecía que estaba de verdad metida en el cochecito, tiene un pendiente de oro en la oreja derecha. Está realizada en madera policromada.
Silvia Sancha.Alumna de la 18B